Los oficios tradicionales en Galicia, patrimonio cultural

Los oficios tradicionales en Galicia, patrimonio cultural

| Caldaria Hoteles y Balnearios

Madera, piedra, barro o metal han sido usados a lo largo de la historia como materia prima para los oficios tradicionales que se desenvolvían en Galicia. Con la llegada de la revolución tecnológica, estos trabajos parecían abocados a la desaparición. Algunos de ellos han logrado sobrevivir a través de los artesanos que han hecho de la tradición su forma de vida y de los museos que ayudan a preservar estas costumbres. Gracias a esto, este patrimonio cultural inmaterial que son los oficios tradicionales ha traspasado la barrera temporal y llegado hasta nuestros días. Si quieres conocer los más arraigados en la provincia de Ourense, no dejes de leer.

Afiador, toneleiro, oleiro y canteiros

Si hay algún oficio clásico que se relacione con la provincia de Ourense este es, sin duda, el de afiador. Con su rueda de afilar recorrían la geografía española y extranjera afilando cuchillos, arreglando paraguas o cualquier instrumento que se les llevase. Las señas de identidad de los afiadores eran además de la rueda, su chifre, que hacían sonar para anunciar su llegar a cada pueblo, y el barallete, una lengua propia que usaban para comunicarse entre ellos y que llegó a contar con 900 palabras. El barallete se considera la jerga gremial más importante de toda España. Ver a los últimos, adaptados a los nuevos tiempos, recorriendo aún algunas calles de la ciudad son un atractivo turístico más de Ourense.

Estatua afiador - Caldaria

En tierra de vinos tiene que haber oficios relacionados con su producción. Los toneleiros son los encargados de todo el proceso de diseño, fabricación y arreglo de los toneles, cubas o pipas para almacenar el vino. Con la madera como materia propia, hacen de esta profesión todo un arte. En diferentes bodegas de O Ribeiro puedes disfrutar de piezas únicas como complemento a una escapada de enoturismo.

Los oleiros, también conocidos como alfareiros, eran artesanos que se dedican a fabricar piezas en barro. Aunque en la actualidad esta cerámica riegan diferentes museos etnográficos, en el pasado los oleiros fueron fundamentales como proveedores de instrumentos para la vida cotidiana.

Por último, no podíamos olvidarnos de los canteiros. Galicia es tierra de piedra y, por tanto, tierra de canteiros. Estos profesionales se encargaban de extraer, labrar y dar forma a la piedra. En cada rincón de esta tierra encontramos un cruceiro, una fuente u otra figura que nos recuerda su importancia. También desarrollaron su propio idioma conocido como verbo dos arxinas o latín dos canteiros, además de los conocidos como signos lapidarios que dejaron marcados en buena parte de sus obras desde la Edad Media.

Donde descubrir más

La provincia de Ourense cuida de estas tradiciones que han construido la historia de sus habitantes a lo largo de los años. Por todo esto, está previsto que próximamente se abra el Museo da Roda de Afiar. Esta exposición acogerá buena parte de la colección de más de doscientas ruedas de afilar que se encuentra actualmente en “A casa das Rodas”, un museo dedicado a la profesión de afiador y que se puede visitar en San Xoan de Río.

En el lugar de Niñodaguia, en Xunqueira de Espadañedo, encontramos el Museo Taller de Olería. Esta población, próxima a la Ribeira Sacra es considerada la segunda más importante de Galicia en alfarería y en este espacio nos enseña la evolución de esta profesión que aquí ha subsistido al paso de los años. También ofrece talleres para los que quieran probar la alfarería de primera mano.

Dos ejemplos de la pervivencia de estos oficios tradicionales que, junto con otros como las lavandeiras, ferreiros, cesteiros o zoqueiras, han servido de base a este patrimonio inmaterial de la provincia de Ourense. Su aportación cultural es incalculable porque para avanzar es imprescindible tener en cuenta nuestros orígenes. Anímate a descubrir más de de la provincia a través de sus oficios tradiconales.

¿A qué esperas? Elige tu experiencia Caldaria